Miembros de la comisión directiva de Boca Juniors expresaron ayer su deseo de resolver el tema del contrato de Riquelme por "vías judiciales, preferentemente en algún organismo internacional como la Corte de Justicia de la Haya", una decisión que sería apoyada por el representante del jugador tras declarar "los dirigentes quieren poner a Román a hacer más publicidades que la brujita Verón y eso no va". Por su parte, el astro futbolístico se limitó a decir que "yo solo quiero jugar en Boca y ser felí y que me paguen cinco millones de dólares".
El representante de Riquelme explicó que la situación se hizo insostenible tras el último contrato que le presentaron. "Querían que Román vaya por lo menos una vez por mes al programa de Susana Giménez y, encima, que cuando jueguen al truco se deje ganar" explicó el hombre, consternado. También dio a conocer la existencia de una claúsula que obligaba al jugador a ponerse a vender choripanes en la tribuna los partidos que no jugara por lesión. "Choripanes y coca cola, ¡por favor! Estamos hablando de un jugador que jugó un mundial y salió campeón en los juegos olímpicos. Si venderia sanguches de milanesa y Agua Ser quizás aceptabamos, ¡pero choripan y coca cola no, no, no!" declaró el representante agitando los brazos.
Los dirigentes dicen haber llegado a la decisión tras cansarse de los reclamos de Riquelme. "Un día te dice que sí, al otro día te dice que no, que sí, que no, ¡parece mi mujer" bromeó el tesorero del club a la espera de unas risas que nunca llegaron. Ante la acusación de los múltiples cambios que introdujeron en el contrato, un dirigente nos explicó la verdad. "En realidad hace dos meses que le venimos mostrando el mismo contrato. Lo único que hacemos es cambiarle la letra, a veces se lo mandamos en Verdana, a veces en Times New Roman. ¡La vez que se lo mandamos en Arial casi lo acepta! Si con Comics Sans no firma vamos a tener que ir a La Haya, no queda otra" explicó el hombre que en secreto confiesa ser hincha de Newells Old Boys.
El representante de Riquelme explicó que la situación se hizo insostenible tras el último contrato que le presentaron. "Querían que Román vaya por lo menos una vez por mes al programa de Susana Giménez y, encima, que cuando jueguen al truco se deje ganar" explicó el hombre, consternado. También dio a conocer la existencia de una claúsula que obligaba al jugador a ponerse a vender choripanes en la tribuna los partidos que no jugara por lesión. "Choripanes y coca cola, ¡por favor! Estamos hablando de un jugador que jugó un mundial y salió campeón en los juegos olímpicos. Si venderia sanguches de milanesa y Agua Ser quizás aceptabamos, ¡pero choripan y coca cola no, no, no!" declaró el representante agitando los brazos.
Los dirigentes dicen haber llegado a la decisión tras cansarse de los reclamos de Riquelme. "Un día te dice que sí, al otro día te dice que no, que sí, que no, ¡parece mi mujer" bromeó el tesorero del club a la espera de unas risas que nunca llegaron. Ante la acusación de los múltiples cambios que introdujeron en el contrato, un dirigente nos explicó la verdad. "En realidad hace dos meses que le venimos mostrando el mismo contrato. Lo único que hacemos es cambiarle la letra, a veces se lo mandamos en Verdana, a veces en Times New Roman. ¡La vez que se lo mandamos en Arial casi lo acepta! Si con Comics Sans no firma vamos a tener que ir a La Haya, no queda otra" explicó el hombre que en secreto confiesa ser hincha de Newells Old Boys.
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